“Ni nuestra sanidad es una catástrofe, ni tampoco una nebulosa de maravillas como nos quieren hacer ver nuestros mandatarios sanitarios. En realidad existen muchos errores y hay que poner freno”. Así de tajante se expresa la Asociación El Defensor del Paciente en su memoria anual correspondiente al año 2010.
En ella se refleja cómo el número de quejas que ha recibido por presuntas negligencias en hospitales y centros de salud castellano-manchegos ha descendido otro año más. Así, las denuncias han bajado un 4,5% pasando de 499 en el año 2009 a 477 el año pasado.
El Hospital General de Ciudad Real sigue manteniendo el segundo puesto entre los cinco más denunciados de toda Castilla-La Mancha. En la lista aparecen todos los hospitales de las
capitales de provincia excepto el de Cuenca, ya que el quinto puesto lo ocupa el Hospital General La Mancha Centro, de Alcázar de San Juan.
Los servicios y patologías más denunciadas por orden descendente son los de traumatología, ginecología, ambulancias y transporte sanitario, urgencias y cirugía general. En concreto, en Ciudad Real el Defensor del Paciente recibió 122 quejas, en 2009 fueron 142. En Cuenca fueron tan sólo 16 las denuncias, 70 en Albacete, 71 en Guadalajara y 198 en Toledo.
En su informe, la asociación hace un repaso por las listas de espera quirúrgica de toda España, en Castilla-La Mancha había el pasado año 16.300 pacientes.
Un aprobado para la región
El Defensor del Paciente cifra los días de media en demora para una intervención quirúrgica en 74,8, sin embargo, Castilla-La Mancha se encuentra por debajo de esta media con 41 días de espera. Por ello, la asociación da un aprobado a Castilla-La Mancha aunque precisa que “no está todo lo bien que debería”.
La asociación El Defensor del Paciente recibió en 2010 un total de 12.162 casos de presuntas negligencias médicas en los centros sanitarios de toda España, 675 menos que en 2009. Del total, 554 fueron con resultado de muerte, 32 menos que el pasado año.
Los casos más habituales se produjeron por mala praxis: intervenciones mal realizadas, altas precipitadas, atención deficiente, infecciones hospitalarias o retrasos en ambulancias.
La principal característica en gran parte de los supuestos, como en años anteriores, es que vienen marcados por el error de diagnóstico, sobre todo en los Servicios de Urgencias.
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